El mercado de la construcción tiene una importancia muy relevante dentro de la economía chilena: es un sector que la atraviesa casi por entero, pues "produce" la infraestructura física en prácticamente todos los sectores económicos. En sí mismo, tiene una participación relevante dentro del producto interno bruto: en 2011 representó el 8,5% del PIB. En relación con la generación de empleo asociada al sector, la construcción es una de las actividades más intensivas en uso de mano de obra o "factor trabajo" en Chile. Además de las actividades directas de la construcción, otras industrias relacionadas (como la de proveedores de insumos, de servicios de ingeniería y otros), generan empleos indirectos relacionados con el sector de la construcción.